Amigos, vivimos en una época donde es difícil imaginar que una persona no pueda sobrellevar una vida sin un celular o una computadora, y está claro que una de las consecuencias de vivir en la era digital es que desarrollamos patológicamente hábitos relacionados con nuestro dispositivo móvil, que si nos llega una notificación hay que revisar el celular, que si nos llaman tenemos que contestar, y es algo que está presente en la vida de muchos de nosotros, que sin el cuidado apropiado, puede llegar a volverse más que un hábito, y convertirse en una adicción.

También la adicción puede darse con los videojuegos, y al igual que con cualquier dispositivo móvil, puede ser un grave problema que afecta nuestras vidas y a los que nos rodean de una manera negativa.

En un reporte de BBC, se nos cuenta las experiencias que tuvo un reportero de esta misma cadena que asistió a un centro de rehabilitación para adictos a los videojuegos, redes sociales y diversos ámbitos que mantienen al usuario pegado a un dispositivo electrónico. El centro trata este delicado tema de igual manera que si se tratara de alcohol o drogas. El reportero se dio a la tarea de hablar con los pacientes y que ellos le contaran sus experiencias, al igual que participar en las terapias y actividades que ellos conllevaban en su rutina diaria.

Además de hablar en los clásicos “círculos para intercambiar experiencias” también existían otras actividades que mantenían a los residentes enfocados en superar su adicción, como es el caso de actividades al aire libre, actividades de interacción social, y terapias grupales de diversas índoles.

Algunos de los pacientes le cuentan al reportero cómo es que fueron a dar ahí y los problemas que tenían antes de llegar al centro de rehabilitación.

Estoy aquí principalmente por una adicción al juego, pero también por un trastorno alimenticio y quizás una adicción al porno también. Bueno, eso todavía está en debate. Lo más difícil que he hecho desde que llegué es borrar mis cuentas de videojuegos. Sudaba y lloraba al hacerlo. A pesar de que fue un problema, todavía tengo buenos recuerdos de mi etapa jugando videojuegos y de la gente que conocí allí.

-Thomas, residente adicto a los videojuegos.


Tambien está el caso de Ethan, quien pasaba mucho tiempo llorando en su habitación. Tenía ataques de pánico. Se autolesionaba. Se drogaba con "cualquier cosa que me cayera entre las manos", y jugaba videojuegos durante toda la noche. A los 15 años, abandonó la escuela. Y más tarde se descubrió que Ethan había sufrido un trauma infantil serio.

Me daba miedo todo el mundo. Me despertaba a las seis de la tarde, solía permanecer despierto durante la noche, es más cómodo, menos gente alrededor. Cuando mis padres estaban durmiendo bajaba las escaleras y comía algo. Cuando mis padres me descubrían simplemente los ignoraba. Pensé que estaba jodido de por vida.

-Ethan, residente adicto a los videojuegos.


Jan Williem Poot es fundador del centro de rehabilitación “Yes We Can” desde 2010. De 42 años y limpio de drogas y de alcohol al que era adicto en su adolescencia, Willem fundó la clínica para ayudar a los jóvenes a superar sus problemas de salud mental.

Cabe mencionar que el programa es para jóvenes entre los 13 y 25 años, dura 10 semanas y tiene un costo aproximado de $64,000 dólares, por lo que no es ninguna sorpresa esperarse que la mayoría de los jóvenes internados son provenientes de familias ricas.

Por primera vez este año, la Organización Mundial de la Salud incluyó en junio formalmente la adicción a los videojuegos en la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE), sin embargo, esta condición que se manifiesta en los afectados sigue siendo un caso tan ambiguo que es difícil compararlo con otras adicciones cuyos daños físicos son más fácilmente notables, pero en el caso de los videojuegos los daños son variables.

Quisiera cerrar esta nota mencionando que en The Hive Gaming apoyamos fuertemente la cultura del gaming, estamos orgullosos de compartir con ustedes y nuestros seres queridos un hobby que nos ha dado tantas experiencias positivas como negativas a lo largo de nuestras vidas y que disfrutamos cada día, dicho esto, es importante apoyar a aquellos que hacen un esfuerzo por afrontar los problemas que la adicción al gaming les ha causado, ya que es un problema que puede llegar a cualquier persona que esté ámbito de los videojuegos, por lo que es importante saber medirse, organizar nuestras prioridades, y darnos cuenta de qué tan lejos estamos llevando nuestro hobby, porque al final del día, lo más importante somos nosotros mismos.

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