2020 nos tomó a todos en curva, pero para aquellos que disfrutamos de los videojuegos fue la excusa perfecta para sumergirnos en algunos de los juegos que teníamos pendientes. Tengo que confesar que a pesar de caer en la categoría de “gamer”, no soy el más aventurero o innovador en cuanto a los títulos que juego se refiere, pero eso no significa que este año no haya sido uno fructífero para mi entretenimiento.

El pan de todos los días para mí es Super Smash Bros. Melee, lo cual no debería ser ningún secreto para ustedes a estas alturas. Y antes de que comenzara la pandemia disfrute de bastantes torneos de Smash Ultimate también, incluso tuve la oportunidad de ir a Oakland para vivir Genesis 7, uno de los torneos más importantes de todo Smash. 

Hablar de tiempos antes de la pandemia me recuerda mucho a los días en casa de mis amigos, jugando Ultimate Chicken Horse y pasando un buen rato, con o sin alcohol involucrado. Si no han probado este juego de plataformas sin duda alguna se están perdiendo de mucho porque es de lo más divertido que puede existir para reirse en compañía después de estresarse por la traición de tus propios amigos en el juego.

Luego llegó la pandemia seguida del encierro y justo cuando pensé que tendría que estar relegado a jugar contra CPUs todos los días, el milagro ocurrió: Slippi, un mod del emulador Dolphin que permite jugar Melee a distancia, de forma muy sencilla y con una conexión tan buena que incluso mis 10 megas de internet son suficientes para tener buena conexión con jugadores nacionales e internacionales. Más adelante esto causaría toda una revolución en internet, si quieren enterarse, la nota está a su disposición:

En junio, como si fuera mi regalo de cumpleaños salió Valorant, que a pesar de que no le dediqué tanto tiempo como quería me recordó por qué me gustan tanto los FPS y que quizás debería entrarle al lado del comentario también, pero Valorant ha sido el único juego que salió año que he jugado, lo demás son entradas de mi larga lista que he ido desempolvando como es el caso de Fire Emblem: Three Houses, Celeste y en menor medida Chrono Trigger, antes de que se enojen conmigo por no haber priorizado Chrono Trigger, hace falta una aclaración: la única razón por la que no me he podido obsesionar con éste último es porque mis dos 3DS decidieron que era momento de descomponerse.

Pero estoy lejos de poder decir que Celeste y FE:3H ya están fuera de la lista, pues todavía me faltan los B y C sides de Celeste (estoy hasta considerando aprender speedruns) y me quedan 1.5 rutas de Three Houses, porque tras más de 300 horas invertidas y muchísima investigación al respecto, tan sólo he completado una ruta y me encuentro en proceso de la segunda. Pero me he enamorado de esos dos juegos por razones completamente distintas. En el caso de Celeste es el gameplay y la historia, ambos sencillos pero con un impacto profundo. En el caso de Three Houses la historia y el gameplay tienen menos que ver y es más por satisfacer la parte de mi cerebro que quiere organizar hasta el más mínimo detalle de todo (cuando se lo propone) y mecánicas que ocultan mucho más de lo que dejan ver. Planear cada promoción, cada detalle de la pelea y de las actividades extra, todo esto han sido horas muy muy muy divertidas para mí. Así que si les gustan los RPG, o las waifus (no los juzgo), Fire Emblem es para ustedes.

¿Ustedes como prefieren pasar su tiempo cuando juegan? ¿En línea o con algún single player? Creo que yo he encontrado un buen balance, cuando quiero jugar algo por mi cuenta puedo elegir lo que sea de mi galería y pasar un rato plataformeando/matando npc’s, mientras que cuando siento la urgencia de practicar mi juego preferido siempre estoy a un par de clics de distancia de poder divertirme por horas jugando con alguien en internet o juntarme a distancia con mis amigos para jugar Among Us y compensar todas las horas de Mario Party que no puedo pasar con ellos (veanse las fotos de abajo). ¿Cuál fue el título al que más le invirtieron tiempo en 2020?

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