Recientemente reconocido como el juego de peleas del año en los Game Awards, Super Smash Bros. Ultimate se ha consolidado como lo que el mismísimo Reggie Fils-Aimé describió como "el crossover más ambicioso en la historia de los videojuegos".

Cuando anunciaron hace ya más de un año que todos los personajes de Super Smash Bros. en la historia de la franquicia estarían disponibles, no pude evitar la emoción, como fanático de la serie, jugador ávido y seguidor de la escena competitiva, la última entrega de la saga fue algo digno de recibirse con coros y aplausos. 

En tiempos donde la relevancia de los juegos fluctúa mucho, es reconfortante ver títulos que mantienen su estatus a pesar de tener más de un año de su release. Claro que papá Sakurai (Masahiro Sakurai, creador de la franquicia) y su equipo de desarrollo se han encargado de traer vida al juego con con la constante introducción de personajes nuevos, poniendo nuevos espíritus y haciendo que cada direct los fans se queden al borde de sus asientos esperando nuevas noticias. 

Sea juego de plataformas o de pelea, no se puede negar que la popularidad de Smash es en buena parte debido a la gran variedad de personajes que pueden elegirse. Todos tienen alguien con quién identificarse, independientemente de su apego a ellos.

Con un roster de más de 70 personajes de distintas franquicias, desde Super Mario hasta Metal Gear y Fatal Fury hay algo en Ultimate para todos los gustos y todas las edades.

Como fan de Pokémon, a mi me llama la atención revivir la gloria de los días de antaño usando a Pokémon Trainer, dando el feeling de estar controlando mejor que nunca a los iniciales de la primera generación. Pero este no tiene que ser el caso para todos y ese es precisamente el punto. 

Con una extensa galería de música puedes usar el juego hasta como reproductor. Si jugar con amigos no es lo tuyo, World of Light ofrece una creativa toma en un modo de historia/single player. Y si tienes interés en competir con personas de todo el mundo está el modo en línea, aunque he de admitir que tiene sus fallas, haciendo indispensable una buena conexión y de preferencia un adaptador LAN para disminuir la sal a causa de lag, la eterna y crónica enfermedad de los jugadores en línea. 

Pero las batallas contra amigos, ya sea para divertirse o para tomárselo más en serio, son para mí la verdadera esencia de este juego. El gameplay de Ultimate se siente rápido en comparación a los últimos dos títulos (si bien no llegando a lo pulido del movimiento de Melee), incorporando mecánicas de todos los juegos anteriores para hacer de SSBU una buena amalgama de lo que representa Smash. 

En México y el mundo hay muchas personas que gustan de jugarlo; no por nada Ultimate se convirtió en el juego de peleas más vendido de la historia, con fanáticos, casuales y jugadores profesionales buscando cada uno su propio estilo. Si lo tuyo es jugar con Smash ball e items en mapas que tienen lava, ahí está la opción. Si lo tuyo es el competitivo, 1vs1 sólo Fox en Final Destination, entonces también Ultimate tiene la opción. Su fortaleza está en su versatilidad. 

Por supuesto el juego está lejos de ser perfecto. Los menús podrían ser mejores, el online necesita mejores servidores, el delay del juego podría ser mejor. Aún con varios contras, la mayoría es un plus, haciendo que la experiencia para nuevos y veteranos sea más que placentera. 

A poco más de un año de su salida, Ultimate cuenta con 4 adiciones (de un total de 5 planeadas) al roster vía DLC. Joker de Persona 5, el icónico dúo de Banjo & Kazooie, El Héroe de Dragon Quest y Terry Bogard, el hijo pródigo de SNK. A todo esto se suma el aún pendiente quinto personaje y todo un paquete más de 5 personajes extras aún por anunciar. Lo cual nos da indicio de que hay Smash para rato. 

Con parches de balance regulares, una comunidad tanto vocal como activa y más presupuesto de la industria dedicado a los deportes electrónicos (aunque no de Nintendo), el competitivo del juego es otro de sus grandes atractivos, haciendo de una entrega relativamente infantil todo un verdadero campo de batalla. En México hay una infinidad de torneos, desde los mensuales consistentes de más de 100 personas en Monterrey, hasta los múltiples semanales de CDMX. Hay nivel por todas partes y de hecho el mejor jugador a nivel mundial es mexicano. 

 

Pero dejando la competencia de lado sigue siendo un must en fiestas, reuniones y por supuesto para educar a tus primos pequeños con lecciones de vida importantes, es decir destruirlos en Smash. Tanto casuales como fans hardcore pueden encontrar algo que les llame la atención. Veremos si en un año la visión del juego cambia o si Ultimate queda pasado de moda, pero todo parece indicar que suceda lo que suceda, este título llegó para quedarse por un buen tiempo.

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