ESIC confirma que FBI investiga partidas arregladas en esports
Mientras en Brasil las loot boxes están en la mira.
7 de abril, 2021
La Esports Integrity Commission (ESIC) se formó en el año 2016 justamente para mantener bajo control las conductas profesionales en los esports, y si has puesto atención a nuestros artículos entonces sabrás que han surgido diversos casos donde algunos jugadores han intentado burlar el sistema y así amañar el resultado de las partidas.
Las investigaciones sobre el arreglo de partidas son complejas y requieren una cooperación significativa entre una variedad de partes interesadas internacionales que incluyen operadores de apuestas, organismos gubernamentales, agencias de aplicación de la ley y partes interesadas de la industria. En consecuencia, dado que las complejidades a menudo no se pueden resolver de inmediato, las investigaciones en este tipo de actividad fraudulenta requiere mucho tiempo, esfuerzo y recursos para completar de manera apropiada.
En una reciente entrevista hecha por slash32 al comisario de la ESIC, Ian Smith, este mencionó que el FBI se ha involucrado en el asunto. Así de seria está la cosa. Posteriormente, PC Gamer se puso en contacto con la ESIC y comentaron que esta colaboración no es algo nuevo, simplemente hasta ahora se hizo público.
Mientras tanto, Brasil también ha tenido problemas con la cuestión de las infames loot boxes, pues han abierto una investigación y, si todo sale bien, prohibirlas por completo. La Associação Nacional dos Centros de Defesa da Criança e do Adolescente (ANCED), que defiende a niños y adolescentes, menciona que esta es una manera de apostar, lo cual está prohibido en Brasil.
En el proceso legal se encuentran varias compañías como Garena (propietarios de Free Fire), Activision, Electronic Arts, Riot Games, Nintendo, Konami, Valve, Ubisoft, Tencent, Microsoft, Apple, Google y Sony.
De llevarse a cabo la demanda, ANCED lograría que Garena suspenda dichas loot boxes hasta que sean seguras para los menores de edad, además de cobrar una multa diaria de cuatro millones de reales (moneda brasileña) hasta que lo hagan; una compensación de mil 500 millones de reales para la ANCED y $1,000 reales para cada niño que use sus juegos.
Que la demanda tenga efecto es otra cosa, pero al menos es un comienzo para que el gobierno de ese país por fin tenga en la mira estas prácticas, que incluso han logrado que varios padres sufran de compras hechas por sus hijos, que no pudieron soportar esta adicción y sucumbieron al atractivo de las microtransacciones.