Están a punto de cumplirse 10 años desde el anuncio de The Legend of Zelda: Breath of the Wild, título que cambiaría todo en la franquicia. Después de una serie de retrasos estuvo listo cuatro años después en 2017, convirtiéndose en uno de los mejores juegos de la saga y de Nintendo en general. Dos años después se anunciaría su secuela y estamos pasando por algo similar.

The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom originalmente iba a ser contenido descargable adicional pero al final se decidió que sería un juego completo. Con una fecha de salida para el 2022 de forma oficial, tuvo un retraso que nos hizo pensar que sucedería lo mismo que con el título anterior, pero ahora que estamos a cinco meses de su lanzamiento creemos que es definitiva.

¿Por qué se tomaron otros 4 años para lanzar este juego? Podría parecer lógico que, al utilizar el mismo mapa y un motor gráfico similar, todo fluiría mejor y en realidad así fue, pero hay que tomar en cuenta que Breath of the Wild se concibió originalmente para Nintendo Wii U y ahora han expandido el mapa, con la posibilidad de surcar los cielos para encontrar más secretos del reino.

No es para menos que sea de los juegos más esperados del año y ahora que se ha mostrado más del mismo, decenas de teorías han surgido por la temática oscura que Eiji Aonuma, productor del juego, ha prometido para esta secuela.

Al no estar ubicado en la línea temporal oficial de la saga, Breath of the Wild y Tears of the Kingdom podrían incorporarse finalmente a esta pero a la vez podrían dar pauta a una nueva, no lo sabemos con certeza y es justamente eso además de tener otro juego de la magnitud del primero que ya no podemos esperar para tenerlo en nuestras manos.

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