Un día me encontraba leyendo noticias en mi teléfono y seguía viendo al mismo mono con casco y con el nombre de “PlayerUnknown’s” y entonces pensaba: “como si fuera alguien”; estaba un poco desconectado del tema y no estaba realmente interesado… hasta que empecé a ver más y más y más sobre el dichoso título Player Unknown’s Battlegrounds por todos lados y por todos los medios posibles.

Desde memes por el horrendo port a Xbox One donde no cargaban texturas o la mala optimización de frames hasta jugadas ingeniosas y compilaciones en Youtube, fue como realmente empecé a saber qué es lo que estaba pasando.

No me involucré tanto hasta que el título “Fortnite” llegó de nuevo a mis “noticias” de Twitter.
¿De nuevo? Sí, Fortnite no es nuevo, es un título anunciado hace 6 años por los creadores de Gears of War, Epic Games, un título que mezcla la construcción de Minecraft con los aspectos de supervivencia de Left 4 Dead, pero no sabríamos mucho del título durante este tiempo hasta su lanzamiento en 2018 bajo el esquema de “Early Access”, incluso ellos mismos dijeron que lo mostraron antes de tiempo ya que realmente iniciaron su desarrollo mucho después.

Es el actual boom y la gente está loca por esta nueva manía, el Battle Royale es lo de hoy y llegó para quedarse.

¿Qué es el Battle Royale? Entendamos que es y por qué se llaman así.

En el 2000 (y no, no es una canción de Natalia Lafourcade), Kinji Fukasaku, dirigió una película llamada “Battle Royale”, cuya premisa sigue a múltiples estudiantes de secundaria abandonados en una isla y forzados a matarse entre ellos en un juego sádico hasta que sólo uno sobreviva ¿Te suena familiar? Pues aquí nació el concepto, que también influenció a la serie de libros y películas de “The Hunger Games”.

Es definitivamente una idea muy interesante, ya que así nacieron algunos títulos con una premisa muy parecida como: DayZ, H1Z1, ARMA 2, Minecraft, PUBG y Fortnite, siendo estos últimos dos los exponentes más importantes del género.

La diferencia entre los títulos mencionados con los dos más recientes que popularizaron el género, es que no eran realmente promocionados como “battle royale”, ni tampoco buscaban innovar, tan solo se intentaba ser divertido y tratar de llevar algunos conceptos a cabo en un juego de supervivencia, algo que muchos siempre han querido pero que la ejecución ha dejado mucho a desear.

PUBG y su salto a la fama.

Fue entonces hasta que Brendan “PlayerUnknown” Greene (sí, si es una persona), creador de un popular mod en ARMA 2 llamado DayZ: Battle Royale, basado en el juego de DayZ y en la película de Battle Royale, decidió crear un juego donde la supervivencia lo era todo y sólo un jugador podía ganar la partida.


Brendan buscó maneras de exponer este concepto en mejores medios, se trasladó a ARMA 3 y luego fue consultado para crear H1Z1: Just Survive y H1Z1: King of the Hill; estaba clara la meta de Brendan y lo que quería mostrarle al mundo, pero no era suficiente.

Vamos a saltar hasta Seúl, Corea, donde también estaban sucediendo cosas interesantes al mismo tiempo. 
Bluehole Ginno Games, desarrolladores de juegos multi-jugador masivo en línea, liderado por Chang-han Kim, se mostraba muy interesado en el concepto battle royale y decidió contactar a Brendan tras probar sus mods de ARMA 2 y 3 para ofrecerle la oportunidad de crear un título completamente nuevo.

Brendan justo había terminado de trabajar en H1Z1 y al saber de la oferta de Bluehole, no lo pensó dos veces y voló hacia Corea del Sur para platicar sobre los conceptos, su trabajo fue tan bueno que sólo unas semanas después se volvió el Director Creativo de Bluehole, algo que era completamente difícil de creer para un estudio Coreano, ya que tener a un desarrollador extranjero era algo completamente nuevo y arriesgado especialmente cuando trabajaba básicamente sin supervisión, todos en Bluehole confiaron en él y rindió frutos.

El juego se manejó como un “Early Access”, modelo de negocios que ha dejado con buen sabor de boca a los jugadores y a la comunidad, permitiendo a los desarrolladores “lanzar” su juego mientras terminan de pulirlo con el tiempo y la ayuda de su público.

PUBG tuvo un éxito explosivo, con millones de jugadores saltando a Twitch para realizar streams, hacer jugadas y crear una comunidad, a tal grado que hoy día se maneja el concepto de convertirlo en “Esport”, otra manera más de transformar un juego en un servicio.

Fortnite rompe récords.

Mientras eso sucedía, volvemos al título que llevaba 6 años cocinándose, Fortnite Save the World, cuyo título también contaba con un modo de juego llamado “Fortnite Battle Royale”, así convirtiéndose en la competencia directa e intencional de PUBG que nadie vio venir, que ya contaba con más de 3 millones de usuarios desde su lanzamiento.

¿Qué haría de Fortnite un título tan interesante si es algo que ya se ha visto? Primero que nada, es gratuito y aunque el juego aún está en desarrollo no te hace sentir que le falten cosas pues todo el tiempo se agrega más y más contenido. El juego es amistoso y está disponible en casi todas las plataformas modernas como: PS4, Xbox One, PC, iOS y hay rumores de una versión para Nintendo Switch.

El juego alcanzó su máxima expresión cuando el rapero y popular meme Drake hizo stream mientras jugaba Fortnite con un popular streamer conocido como “Ninja”, rompiendo récords de audiencia con más de 635,000 personas viendo el evento, esto es grande (y no porque Drake sea fan de la pizza hawaiiana) porque realmente nunca se había logrado algo como eso y ahora todo el mundo quiere ser parte de ello, o quiere mostrarse jugando el mismo título, todos queremos ser especiales.

Con toda esta fiebre, sólo fue natural para mi sentirme atraído y descargar Fortnite el cual me gustó mucho y pienso seguir jugando hasta que por fin mate a alguien… ya que soy malísimo. A menudo me sentí recompensado al saciar mi curiosidad por exploración encontrando armas raras, construyendo escaleras y paredes para protegerme de mis depredadores.

Y así explotó el género de battle royale, con grandes ambiciones e iniciativas, desde abajo y con la frente en alto. Porque no había algo así cuando todo empezó pero ahora es una de las fuentes más grandes de ingresos en la industria moderna de los videojuegos.

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