Pocas sagas se quedan impregnadas en nuestra memoria como las que Konami nos dio durante sus años dorados. Juegos como Gradius, Castlevania, Silent Hill son considerados hoy en día como clásicos de culto, pero uno que resalta de entre todos ellos es Contra, que inició en los arcades desde 1987, para después posicionarse en Nintendo y PlayStation.

Pero si hablamos únicamente de Nintendo, recordamos con nostalgia los dos primeros títulos (versiones domésticas de los juegos originales de arcade) que nos impactaron con el excelente gameplay, múltiples perspectivas para jugar y un soundtrack exquisito para hacernos sentir total adrenalina con cada bala disparada hacia Red Falcon.

Cuando pocos años después se lanzó Contra III: The Alien Wars, nunca creímos que se podían mejorar los anteriores juegos, pero qué equivocados estábamos pues con la innovación tecnológica también se logró mejorar la experiencia al aprovechar la capacidad del SNES de acercar y alejar la pantalla, además de rotar el fondo, al igual que poder manejar un vehículo a toda velocidad haciendo de la acción algo épico.

Contra III es considerado como uno de los juegos más difíciles de SNES, pues toda la acción frenética y constante aunado a que basta un sólo toque para perder una de tus pocas vidas (sin tomar en cuenta que tienes continues limitados) frustró a muchas generaciones, aunque como cualquier juego, si tienes la suficiente paciencia puedes reconocer los patrones y terminarlo hasta en la dificultad más alta.

A pesar de no contar con un final elaborado ni la mejor trama de la época, Contra III continúa siendo uno de esos juegos que puedes disfrutar siempre que coloques el cartucho y enciendas la consola, sobre todo si lo haces con un amigo y llegas a la escena final, que básicamente es un Boss Rush pues los jefes finales no te dejarán en paz. Afortunadamente contábamos con el Código Konami (aunque sólo en la versión japonesa), ¿aún lo recuerdas?

Tanto éxito tuvo este título que se lanzó un port para Game Boy clásico, que hizo todo lo posible por mantener la mayoría del contenido del original a pesar de las claras limitantes; y años después se lanzaría un port más para Game Boy Advance, pero a diferencia de las otras versiones este reemplazaría los niveles con vista desde arriba por dos de Contra: Hard Corps.

Como curiosidad adicional, Contra sufrió de la censura debido al contenido violento que transmitían de acuerdo a la perspectiva en algunos países, por lo cual se sustituyó a los personajes con apariencia humana por robots. Posteriormente estos personajes serían añadidos al repertorio habitual de los juegos más recientes.

Podríamos seguir hablando de la saga con la secuela que nos reafirmó la nostalgia una vez más con Contra 4, o de los intentos fallidos de revivirla con Contra: Rogue Corps (por favor, evítenlo a toda costa), pero es mejor que si siempre quisiste experimentar o revivir las experiencias de estos juegos, te recomendamos conseguir la colección de aniversario que está disponible en Nintendo Switch, PlayStation 4, Xbox One y Steam.

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