Sony tendrá que dejar caer un poco de cambio de sus bolsillos después de que la Corte Federal de Australia lo demandara por violar la ley del consumidor del país al engañar a las personas sobre los reembolsos de sus videojuegos.


Nada más y nada menos que $3.5 millones de dólares, esa es la gran suma de dinero que Sony deberá pagar. A continuación se explica a detalle en un comunicado de prensa sobre la Competencia y el Consumidor de Australia:

Entre octubre de 2017 y mayo de 2019, los Términos de Servicio de Sony Europe implicaban que los usuarios no tenían derechos de garantía del consumidor con respecto a la calidad, funcionalidad, integridad, precisión o rendimiento de sus juegos digitales comprados. Esto era falso ya que estas garantías no pueden ser excluidas, restringidas o modificadas.

Sony Europe dijo, supuestamente, que los jugadores en Australia solo tenían 14 días para regresar un juego digital y que incluso necesitarían una autorización del desarrollador del juego para cumplirse el reembolso.

El presidente de ACCC, Rod Sims, dijo en un comunicado:

Los derechos de garantía del consumidor no caducan después de que se haya descargado el producto digital publicitario y ciertamente no desaparecen después de 14 días o cualquier otra fecha arbitraria reclamada por una tienda de juegos o desarrollador. Lo que Sony dijo a estos consumidores era falso y no refleja los derechos de garantía del consumidor otorgados a los consumidores australianos.

No sabemos si se trató de un simple error o si fue una acción premetiada, pero de una forma u otra, Sony deberá prestar más atención a la forma en cómo ofrece los reembolsos a partir de ahora.

Fuente [ACCC]

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