Muchas veces nos preguntamos cómo sería un mundo en el que el ser humano ha desaparecido y los que gobiernan el planeta tierra son los animales, que además de haber evolucionado y adaptado a su beneficio la tecnología humana, cometen los mismos errores de la humanidad: la guerra; afortunadamente ya podemos saber cómo sería una situación así, gracias al misterioso y divertido videojuego Clid The Snail.

Este fascinante título fue desarrollado por Weird Beluga Studio, un equipo pequeño que a pesar de ello logró crear un título con cierta personalidad gracias a su casi excelente ambientación, personajes y un gameplay decente. 

Clid The Snail nos pone en la piel de un caracol llamado Clid, quien es exiliado de su ciudad, forzado a vivir lejos de los suyos, debido a su gusto por las aventuras y los constantes conflictos que generaba con las Babosas, las enemigas principales del juego. Al buscar un hogar tras ser expulsado se encuentra con un grupo de exiliados. Mercenarios que combaten distintas amenazas y ayudan a los débiles, todo por un precio. Clid se une a este equipo con el objetivo de detener la amenaza Babosa que constantemente ataca a otras razas y ciudades. 

El mundo que explotaremos podría bien ser el planeta tierra o algún otro planeta que alguna vez habitamos los humanos. Mientras lo exploramos podemos ver cientos de objetos originados de la mente humana, como electrodomésticos, relojes, anillos de bodas, entre muchos otros. Los animales, ahora habitantes del mundo, se refieren a los humanos como ‘Los Gigantes’, y mientras algunos los veneran y rezan por su regreso, otros simplemente viven tranquilos viendo cráneos de humanos esparcidos por el mundo. Este trasfondo encaja perfectamente con los distintos escenarios que recorremos. Friolentas montañas nevadas, pintorescos pero peligrosos bosques y desiertos infinitos son algunos de ellos, todos con algo que te hace recordar “rayos, todos los humanos murieron… ¿por qué?”.

Lo realmente interesante es conocer a los personajes y a los distintos habitantes de este mundo, que van desde murciélagos, ranas, puercoespines, caracoles, saltamontes, luciérnagas y muchos más; todos bípedos (andan a dos patas en lugar de cuatro), todos con una esencia que hace recordar a la humanidad.

Y esto es solamente el trasfondo del juego. ¿Qué pasa con el gameplay? Clid The Snail pertenece al género ‘twin stick’, que significa que te mueves con un joystick y apuntas con el otro. Es aquí cuando ves a Clid, un caracol armado con un amplio catálogo de armas de fuego, granadas, torretas automáticas y un caparazón con distintos poderes, atravesando un bosque repleto de babosas de distintos tipos (magos, guerreros con escudo, ‘ogros’ y más) mientras resuelves algún puzzle ocasional y lees referencias a la vida real, como una banda de insectos llamada Bugs N' Roses.

En serio, los logros de este juego son lo mejor. Hay uno llamado ‘Los Ogros tienen Capas’ , el cual obtienes al derrotar a un mid-boss. Si no entendiste la referencia te recomiendo ver la película de Shrek.

Siendo sincero el gameplay se llega a sentir lento y muy pausado, pues el título se centra más en la ambientación y en el cómo te ubicas dentro del mundo y del escenario en el que estás. La variedad de aditamentos y armas realmente ayuda a que cada combate tenga la posibilidad de ser distinto, aunque algunas veces termines olvidando que puedes usar más de un arma.

Llega a haber momentos en los que extrañas el combate, pues simplemente quieres dispararle a algo y el juego se centra en que aprecies lo hermoso del mundo, lo cual está bien, pero creo que prefiero dispararle a una babosa gigante con mi lanzallamas, muchas gracias. 

El único aspecto decepcionante podría ser la música, aunque es difícil decidir. El juego no es consistente en la banda sonora que usa y constantemente, después de minutos de vagar por el mapa, te das cuenta que ni siquiera suena algo de fondo para distraerte del hecho de estar perdido porque ya no sabes qué estabas haciendo o a dónde tenías que ir. 

No negaré que hubo segmentos con selecciones musicales dignas de un compositor nivel dios como Beethoven, sin embargo unas cuantas partes no compensan la poca armonía que pudieron crear con el ‘todo’.

Algo divertido sucede al explorar el mundo,y es es que en ocasiones no es claro hacía donde tienes que ir, por lo que más de una vez brincarás al vacío pensando que ibas en la dirección correcta pero en realidad no era así. Esto te llevará al último ‘Checkpoint’ y te verás obligado a recorrer el mismo camino de nuevo.

En general Clid The Snail es un juego que te cautiva por su ambientación y su historia, por las divertidas referencias a la cultura popular y por un gameplay entretenido que implementa buenas ideas y conceptos, tanto en sus armas como en sus objetos consumibles. A pesar de los claros fallos de diseño que puede tener en ocasiones, es una aventura que vale la pena vivir, solo por decir que alguna vez jugaste un juego en el que las Babosas intentaron destruir al resto de especies animales del planeta.

Clid The Snail fue seleccionado como el mejor juego enel  2019 en los Premios PlayStation Talents. Por esto y por todo lo anterior es que merece una oportunidad