Numerosas acusaciones de abuso sexual en la FGC y Super Smash Bros.
Rompiendo el silencio.
2 de julio, 2020
/ Rodrigo "Roy" Sarmiento
En las últimas 48 horas, la comunidad de Super Smash Bros. Ultimate y la FGC han sido parte de la ola de víctimas que salen a denunciar públicamente a sus agresores sexuales, con muchos nombres prominentes viéndose en el centro de la controversia.
Es necesario comenzar reconociendo el valor de las víctimas al salir del silencio y a la incertidumbre de ventilar sus experiencias traumáticas. Dicho lo previo, como miembro de la comunidad de Smash, me resulta genuinamente triste, desconcertante y alarmante que tantas figuras tan relevantes de las comunidades competitivas resulten acusados de actos de pedofilia y abuso sexual.
My own story in the FGC
— Mikey~ CrackPr0n (@PyronIkari) July 2, 2020
Read: https://t.co/DJbPt0GrQZ
Los casos son muchos, una lista más completa está en el siguiente link. Nombres de comentaristas como Rich “Keitaro” King, D'Ron “D1” Maingrette y Cinnamon “Cinnpie” Dunson han salido a la luz como perpetradores sexuales, 2 de los 3 por pedofilia y en un caso por violación. Además del ex-jugador de NRG, Nairoby “Nairo” Quezada quién también fue denunciado por tener contacto sexual con un menor. Y para la FGC quizás el más notable es Joey "Mr. Wiz" Cuellar, fundador y director de EVO, acusado también de actos de pedofilia.
— Nairo (@NairoMK) July 2, 2020
Más que una noticia esto es algo que pega cerca de casa, pues son figuras que eran consideradas ejemplares para una comunidad que está conformada en su mayoría por personas menores, al menos en el caso de Smash. Aunque ha habido al menos un caso en el que las acusaciones se habían confirmado como mentira, hay prioridad en escuchar a las víctimas y realizar las investigaciones correspondientes, para asegurar que los castigos sean efectivos y las personas culpables removidas de la comunidad.
Con todo el dolor que implican los cambios, es necesario tomar acciones para asegurar que las comunidades de videojuegos sean un lugar seguro, incluyente, que promueva la diversión y la sana competencia, no un nido de depredadores sexuales esperando a ser revelados y tengo el presentimiento de que habrá mucho más por venir en el camino a una mejora sustancial.
