Nuevos reportes aseguran que el propio CEO de Activision Blizzard participó en las conductas inhumanas que fueron parte del día a día de muchos trabajadores dentro de la empresa. Bobby Kotick aparentemente también tuvo distintas actitudes despreciables con las mujeres de la compañía

A principios del año Kotick aseguró no tener ni idea sobre el acoso y discriminación que se vivía dentro de Activision Blizzard, sin embargo un nuevo reporte de The Wall Street Journal ha revelado que no solamente sabía de todo lo que sucedía en las oficinas, sino que también incurrió en restar importancia o ignorar el maltrato a las mujeres.

Muchos se han cuestionado la culpabilidad o inocencia de Kotick, pues resulta difícil creer que jamás se percató de situaciones de este tipo durante todo el tiempo que dirigió la empresa. El mes pasado él mismo se disculpó con el personal y acordó un pago de $18 millones con los reguladores federales, además de comprometerse a comenzar a implementar medidas para ofrecer una mejor calidad de vida a sus empleados. 

Activision ha salido a responder ante el reporte de The Wall Street Journal:

Estamos decepcionados con el informe del Wall Street Journal, que presenta una visión engañosa de Activision Blizzard y nuestro CEO. Se actuaron sobre los casos de conducta sexual inapropiada que se señalaron a su atención. El WSJ ignora los cambios importantes que se están llevando a cabo para hacer de este el lugar de trabajo más acogedor e inclusivo de la industria y no tiene en cuenta los esfuerzos de miles de empleados que trabajan duro todos los días para estar a la altura de sus - y nuestros - valores. El deseo constante de ser mejores siempre ha diferenciado a esta empresa.

Por eso, bajo la dirección del Sr. Kotick, hemos realizado mejoras significativas, incluida una política de tolerancia cero para la conducta inapropiada. Y es por eso que avanzamos con un enfoque, velocidad y recursos inquebrantables para continuar aumentando la diversidad en nuestra empresa e industria y para garantizar que todos los empleados lleguen al trabajo sintiéndose valorados, seguros, respetados e inspirados. No pararemos hasta tener el mejor lugar de trabajo para nuestro equipo.

En el mismo reporte se pueden ver nuevas acusaciones a otros miembros importantes de la compañía. En primer lugar el exjefe de tecnología de Blizzard, Ben Kilgore, quien fue despedido en 2018 después de una investigación sobre múltiples acusaciones de acoso sexual. Kilgore no respondió a la solicitud de comentarios de The Wall Street Journal.

Después tenemos a Javier Panameno, un ex supervisor de Sledgehammer Games que fue acusado de violar a una mujer y acosar sexualmente a otra. Según The Wall Street Journal, una de las mujeres agredidas denunció ambos incidentes a recursos humanos antes de dejar la empresa en 2017, pero Activision Blizzard no investigó las acusaciones y posteriormente despidió al supervisor cuando un abogado de una de las mujeres envió un correo electrónico a la empresa. 

Activision llegó a un acuerdo con la mujer fuera de los tribunales, pero según los informes Kotick no informó a la junta directiva de la empresa sobre el incidente. 

Por último tenemos a Dan Bunting, codirector de Treyarch hasta este mes, quien fue acusado de acosar sexualmente a una compañera de trabajo en 2017 después de una noche de fiesta y alcohol. Según el informe, una investigación interna recomendó que fuera despedido, pero Kotick intervino para evitar eso y, en su lugar, se le brindó asesoramiento a Bunting. Bunting no respondió a la solicitud de comentarios de The Wall Street Journal. ¿Acaso esto cambiará ahora que la compañía tiene una política de “cero tolerancia”?

Recientemente un grupo de accionistas, liderado por el grupo de pensiones sindicales SOC Investment Group, exigió la renuncia del director ejecutivo de Bobby Kotick y el retiro de otros dos miembros de la junta directiva: Brian Kelly y Robert Morgado. La carta también cuenta con las firmas de otros grupos de inversión, varios de los cuales se dedican a apoyar a las mujeres en diversas industrias.

El poder de estas acciones en conjunto podría llegar a tener un impacto en la posición actual de Kotick, pues es inusual que los trabajadores y los accionistas coincidan en los mismos intereses. Activision Blizzard está muy dañada, y hará falta una serie de cambios drásticos para sanarla.

Vía [Kotaku]

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