LOS VIDEOJUEGOS: EL NUEVO HOLLYWOOD DE LAS CELEBRIDADES
Desde hace algunos años, grandes actores se han involucrado en importantes roles en videojuegos.
15 de noviembre, 2019
El pasado 9 de junio, en el abarrotado teatro Microsoft, los asistentes ovacionaron el tráiler de Cyberpunk 2077 al ver la aparición de la versión digitalizada de Keanu Reeves en la pantalla. El actor se volvió tendencia mundial cuando apareció en el escenario y respondió a uno de los asistentes que le gritó: “¡eres maravilloso!” con su ya famoso: “¡no, TÚ eres maravilloso!”. Este emblemático momento que nos regaló Keanu muestra la notable evolución de la industria de los videojuegos, que con sus $43 mil millones de dólares, comienza a desafiar al cine y la TV atrayendo talentosos actores con muy buenos guiones, personajes con grandes matices y técnicas de captura de imagen cada vez más realistas.
El que fue quizá el juego más esperado del año, Death Stranding, que debutó el 8 de noviembre pasado, también cuenta con un actor protagonista, Norman Reedus, mundialmente famoso por la serie The Walking Dead. Reedus ha trabajado en videojuegos antes dándole voz a su personaje Daryl Dixon y aceptó la oferta de Hideo Kojima gracias a su amigo el director mexicano ganador del Oscar, Guillermo del Toro, quien le advirtió que sería contactado por Kojima y que debía aceptar la propuesta que en ese momento se trataba de una secuela de la franquicia Silent Hill donde el mismo Del Toro participaría junto a Kojima y el mangaka maestro del terror Junji Ito. El proyecto nunca se concretó pues Kojima se separó de Konami; sin embargo, la unión de Reedus se mantuvo con Kojima Productions, lo que terminó en el desarrollo de Death Stranding. Hace poco Hideo Kojima durante un documental de la BBC, anunció que en el futuro comenzará a hacer cine, diluyendo cada vez más la distinción entre el cine y los videojuegos.
Jeremy Davies (Saving Private Ryan, Lost and Justified) intentó entrar a la industria de los videojuegos desde hace mucho tiempo y por fin lo consiguió con God of War, el juego que fue condecorado como Mejor juego del Año en los Video Game Awards y que además le hizo acreedor a Davies del premio BAFTA Games a la Mejor Actuación en un Videojuego 2018.
Los actores comienzan a darse cuenta de las ventajas que tienen al interpretar personajes en un videojuego, donde hoy en día las técnicas de captura de imagen son capaces de traducir al detalle las gesticulaciones y complejas expresiones faciales que necesitan como actores para transmitir su actuación, lo que es muy importante desde el punto de vista interpretativo, además de contar con toda la tecnología para desarrollar tramas en mundos fantásticos o cualquier época posible. Las tramas son complejas, contando en promedio con más de 200 páginas por guion, lo que rondaría las 10 horas de contenido; sin embargo, hay títulos, como Red Dead Redemption 2, (donde incluso puedes jugar como un pájaro) que tiene más de 500 mil líneas de diálogo, lo que suman más de 80 horas de contenido.
Los actores graban una o dos veces al mes por dos o tres días durante dos años para juegos convencionales, pero en otros como la franquicia Red Dead o para el juego Death Stranding, el periodo de grabación puede extenderse hasta por 5 años.
Las grabaciones se llevan a cabo en estudios de Nueva York, Los Angeles, Tokio o Londres, donde los actores utilizan trajes de licra con arneses para cámaras en su espalda y son grabados por decenas de cámaras de todos los ángulos, una experiencia que resulta muy interesante para los actores, pues deben manejar distintas técnicas de actuación que no suelen usarse en televisión o cine. Janina Gavankar que trabajó en Star Wars Battlefront II, comenta que algunos estudios prefieren no trabajar con actores de TV precisamente porque sus interpretaciones funcionan para series pero no para videojuegos, es por ello que los actores de teatro cuenten con cierta ventaja en las audiciones.
Gracias a todo lo anterior, los actores no son los únicos interesados en entrar a la industria de los videojuegos, escritores, directores y creadores en general comienzan a dirigir su interés al mundo de los videojuegos.
En junio pasado, J. J. Abrams lanzó Bad Robot Games junto con Tencent, el gigante chino de medios; Justin Roiland, el co-creador de Rick y Morty, (que estrenó su cuarta temporada hace unos días) lanzó al mercado el pasado junio junto a Squanch Games el juego Trover Saves the Universe para PS4 y la magnate Megan Ellison, ha publicado juegos indie ganadores de premios a través de su productora desde 2017.
Con nombres como Reeves seguramente la competencia se volverá más feroz, pero esto también puede ayudar a que grandes casas productoras comiencen a crear proyectos y quizá hasta crear su propia división enfocada en los videojuegos; además, los premios BAFTA, de la Academia Británica de Artes Televisivas premian cada año a los más importantes contribuyentes del cine y es un gran paso que estos importantes premios ahora también reconozcan a los videojuegos como verdaderas obras de arte, lo que indica que la industria es cada vez más valorada por sus aportes artísticos.
Fuente: [ The Hollywood Reporter ]