La experiencia de una camgirl en Animal Crossing
Cuando pedir servicios llega a nuevos niveles.
22 de julio, 2020
Debido a la cuarentena, muchos podemos presentar cierto grado de soledad y ansiedad, no importa si eres alguien introvertido o extrovertido, a todos nos afecta en cierto grado. En Kotaku, una modelo webcam compartió su experiencia y pensamientos sobre cómo es que llegó a conocer la franquicia de Animal Crossing.
Amanda tiene 24 años y se gana la vida como stripper, pero con el aislamiento social obligatorio se vio forzada a regresar a ser una camgirl, reactivando su cuenta de OnlyFans (sitio donde se te permite vender material personal y sexual, ya sean fotos o videos). Su sorpresa fue grande cuando uno de sus clientes le regaló un Nintendo Switch Lite con Animal Crossing: New Horizon y le pidió que jugara con él.
Desde entonces, Amanda cobra $20 dólares para que puedas visitar su isla durante 30 minutos, algo así como tener una cita en Animal Crossing. Cuando un cliente solicita tener más contacto con una camgirl normalmente le pide su número telefónico o cuenta de Telegram, pero jugar con ella es de las formas más inusuales de hacerlo.
Actualmente tiene seis clientes frecuentes, lo cual le ha generado una buena entrada de dinero gracias a los jugadores que esperan ser más íntimos con [el personaje de] Amanda. Y no solamente gana en la vida real, pues también le dejan regalos que puede utilizar en su partida, por lo que su isla también se ve beneficiada.
Amanda confiesa que todo esto es muy fácil para ella porque sus clientes se encargan de encontrar todos los ítems raros sin tener que pagarles por ello, así que obtiene beneficios en ambas vidas. En cambio, los clientes pueden tener una cita un poco más cercana en el juego (al menos su personaje) y a la vez tener la oportunidad de verla desnuda en una sesión privada en cámara.
Amanda compara este tipo de servicio como una versión alterna de Twitch, y si en un futuro se anima a comprar un Nintendo Switch estándar entonces consideraría iniciarse como streamer, sobre todo porque muchos de sus clientes ya comenzaron a preguntarle si juega otros títulos cooperativos.
Fuera del negocio que esta chica ha hecho, ella también ha encontrado una forma de sobrellevar la cuarentena con ayuda de los videojuegos y es curioso ver toda clase de historias sobre cómo incursionaron en esta forma de entretenimiento. Siempre y cuando las historias sean positivas.
Fuente: [Kotaku]