En agosto del año pasado, seis jugadores australianos del famoso juego Counter Strike: Global Offensive fueron arrestados por arreglar las partidas en las que jugaban. Inofensivo si lo ves por la superficie, pero algo sucio si tomamos en cuenta que involucra mucho dinero en efectivo en tales partidas.

Las apuestas para determinar qué equipo resultaba vencedor es algo bastante común en todos los deportes y los esports no son la excepción. Ya hemos visto en otros juegos cómo los mismos jugadores se ponen de acuerdo para repartirse a la mitad la ganancia de sus premios o para enfocarse contra otro jugador y así no clasifique.

Solamente cinco de estos jugadores fueron encontrados culpables de los cargos que se les imputaron después de una exhaustiva investigación; cuatro de ellos con 20 años y uno con 27 años de edad, mientras que uno de ellos también tuvo cargos por posesión de cannabis y por presentar conducta que amañaría el resultado de un evento en específico o de contingencia.

Cuando esta clase de delitos involucra una liga oficial y miles de dólares en juego, claro que habrá consecuencias de este calibre. Parece que ni entre los mismos jugadores se quita la idea de que ya no es un simple juego.

Los acusados estarán obligados a asistir a la Corte de Magistrados designadas a su localidad más cercana el día 15 de septiembre, así que necesitarán a un abogado “hábil” para poder salir de esta.

Fuente: [Departamento Policial de Victoria, Australia] Vía: [Kotaku]

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