El CEO de Unity se despide de la compañía tras el anuncio de la nueva tarifa de cobro por instalación de juegos, la cual ha causado gran descontento en la comunidad gamer, incluyendo a desarrolladores de videojuegos.

John Riccitiello, quien era el director ejecutivo de Unity, ha abandonado a la empresa de software de desarrollo de juegos, dejándola a su suerte tras uno de los anuncios más controversiales de toda la historia de los videojuegos.

La nueva tarifa de Unity cobraría a los desarrolladores de juegos una cantidad específica determinada a partir de la cantidad de veces que un juego fuera instalado por sus usuarios. Tras su anuncio, desarrolladores y usuarios criticaron a la compañía, la cual se retractó a los pocos días de haber anunciado su esquema de pagos.

Ahora que la compañía se ha quedado sin CEO, James M. Whitehurst, ex director de Red Hat, reemplazará a Riccitiello como CEO mientras la junta directiva de Unity busca un nuevo reemplazo a largo plazo.

En su despedida, Riccitiello expresa su deseo de poder apoyar a la compañía durante esta transición y seguir el éxito futuro de la misma, sin embargo actualmente es difícil imaginar un futuro con Unity. Cientos de compañías desarrolladoras gigantes, e independientes, han decidido dejar atrás el motor gráfico que durante tantos años les permitió entregar experiencias virtuales a la comunidad.

Riccitiello llegó a Unity en 2014 tras dejar Electronic Arts. Y a contrario de lo que muchos creen, le hizo mucho bien a la compañía desde entonces. Supervisó el cambio de licencia única a un modelo de suscripción continua, lanzó la IPO en 2020 y realizó una serie de adquisiciones, incluyendo la firma de monetización en aplicaciones IronSource en 2022.

Es importante ahondar un poco en el pasado de Riccietiello, específicamente en Electronic Arts. Sus intentos de monetización se volvieron más agresivos en FIFA y Battlefield, con DLCs disponibles desde el día uno, microtransacciones y un enfoque al contenido post-lanzamiento.

Tras su llegada a Unity, la compañía llegó a la bolsa con un increíble precio en sus acciones de $68 dólares. Hoy cuestan aproximadamente $30 dólares. Si suben o bajan dependerá de los próximos anuncios que haga la compañía, aunque el daño ya está hecho.

Vía [Kotaku]

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