13 PELÍCULAS DE TERROR PARA VER ESTE HALLOWEEN

Todos conocemos los típicos títulos clásicos de terror que se pueden ver durante la época de Halloween: The Shining, The Exorcist, Carrie, Rosemary's Baby, A Nightmare on Elm Street, The Texas Chainsaw Massacre, y la misma Halloween, es por eso que  aquí les tenemos una lista (sin ningún orden particular) de películas donde  dejaremos un poco de lado a los títulos más recurrentes, pues nos enfocaremos en aquellos títulos que son subestimados o poco conocidos dentro de los variados sub-géneros de terror.

Hereditary (2018)

La proyección de este filme independiente durante el Festival de Sundance 2018 provocó que varias personas salieran asustadas de la sala. El creador de la historia, Ali Aster, se inspiró en varias experiencias personales para desarrollar la trama sobre una familia que intenta lidiar con la muerte de un ser querido. La pena y el trauma del drama familiar que eventualmente terminó transformándose en una pesadilla que los llevará a intentar huír de la poderosa herencia que parece ser su destino. El elenco está encabezado por Toni Collette (Annie) y aunque Alex Wolff (Peter) y Milly Shapiro (Charlie) son actores muy jóvenes, su actuación se encuentra a la par de la veterana Collette.

Hush (2016)

Esta película forma parte del sub-género de “invasión del hogar”, lo que la distingue de sus pares, es que la protagonista (Kate Siegel), una escritora de novelas de misterio que vive sus días aislada del exterior con solo la compañía esporádica de sus vecinos, es sordomuda, por lo que el acechador (John Gallagher Jr.) que porta un cuchillo y una ballesta, puede entrar a su casa sin ser detectado. El director Mike Flanagan manipula los sentidos de la audiencia de una forma magistral con herramientas como la ausencia de sonido, lo que provoca una atmósfera de gran tensión y suspenso. A pesar del mutismo de la protagonista, Siegel logra atraparnos con su personificación de una mujer vulnerable pero muy determinada a luchar hasta el final con tal de sobrevivir.

The Fourth Kind (2009)

La aterradora premisa de este pseudo-documental, cuenta la historia de Nome, un pequeño y aislado pueblo en Alaska que ha sufrido la desaparición de varios de sus pobladores desde 1960. La psicóloga Abigail Tyler (Charlotte Milchard) investiga desórdenes del sueño y nota que sus pacientes comparten las mismas visiones, lo que la lleva a descubrir por medio de hipnosis que sus pacientes han sido abducidos por hostiles aliens. Milla Jovovich ayuda a recrear lo ocurrido interpretando también a la doctora Tyler. Las escenas “reales” y las recreaciones son a veces puestas en la misma pantalla creando una atmósfera de realismo en el filme. El director, Olatunde Osunsanmi, participa en la película como el entrevistador de la doctora Tyler.

One Hour Photo (2002)

Las películas de Robin Williams han sido en su mayoría, comedias que se han vuelto clásicos en su género, sin embargo en este filme, la estupendamente escalofriante actuación de Williams, nos recuerda que se trataba de un actor muy completo. Sy Parrish (Robin Williams) es un hombre que trabaja como técnico de fotografía en la sección de revelado en un supermercado, su fascinación por la “idílica” familia Yorkin, lo hacen obsesionarse al grado de volverse su acosador. El director Mark Romanek, utilizó la bonachona e inofensiva fachada de Williams para recordarnos que el peligro puede estar detrás de las personas más inesperadas.

Freaks (1932)

Esta obra maestra del cine clásico de horror causó tanta controversia en su época que fue vetada durante varios años por la “explotación comercial de personas con deformaciones con la presunción de dignificarlas” y aunque hoy en día se considera un filme de culto, sigue siendo tan perturbadora ahora, como lo era en aquel entonces. El director, Tod Browning, utilizó su propia experiencia en un circo para crear la trama, que trata sobre una trapesista que seduce a un enano por su dinero mientras intenta subir de rango entre los “fenómenos”, que fueron interpretados por personas con anormalidades físicas reales. El estrés que provocó el trabajar con personas que no solo no eran actores sino que además necesitaban mucha paciencia y cuidados, causó que el propio director pasara días sin dormir debido a las pesadillas que contínuamente lo agobiaron durante el rodaje. El escándalo que siguió a su estreno, provocó que la película fuera recortada de 90 a 60 minutos sin el consentimiento del director, para quien el filme significó un profundo golpe del que su exitosa carrera ya no se pudo recuperar.

Bone Tomahawk (2015)

Este filme es la curiosa amalgama entre una película de horror y un western, lo que la convierte en algo único en el género de terror. La estructura sigue la historia básica de cualquier película del viejo oeste: el Sheriff Franklin Hunt (Kurt Russell) se une a un grupo de hombres (Richard Jenkins, Patrick Wilson y Matthew Fox) con la intención de rescatar a varios pobladores que han sido secuestrados por un siniestro grupo que vive en cuevas y aquí es donde termina el western e inicia el terror. El director S. Craig Zahler, no escatimó en la brutal violencia que deben afrontar los protagonistas para defenderse de la tribu que resulta ser de caníbales, con infernales escenas de crueldad ritualizada que ya no es común ver en películas de terror modernas, este filme logra reavivar el moribundo género western con un interesante giro.

Fear(s) of the Dark (2007)

Esta increíble antología francesa de animación está compuesta por historias independientes de 6 reconocidos artistas del cómic y diseñadores gráficos, que incluyen a: Blutch, Charles Burns (Black Hole), Richard McGuire (Here) los italianos Lorenzo Mattotti y Pierre Di Sciullo y la diseñadora gráfica Marie Caillou, cada uno mostrando su estilo visual propio pero compartiendo la paleta en blanco y negro y el tema: el concepto de temor. Algunos optando por el dibujo a mano y otros por el diseño en computadora, estas historias exploran los horribles efectos del miedo en las personas, con tramas que van desde un estudiante perdidamente enamorado cuya novia se encuentra extrañamente fervorosa en su afecto, hasta una niña japonesa amenazada por un samurai que murió hace mucho tiempo y una jauría de perros sedientos de sangre, hay una historia para perturbar el sueño de cualquiera.

Tusk (2014)

Esta abominable película de “horror corporal” inició con algo tan simple como una broma: una persona posteó un anuncio ofreciendo renta gratuita a alguien que se disfrazara como morsa durante 2 horas al día. El anuncio fue el caldo de cultivo perfecto para que la retorcida mente del director, Kevin Smith, creara una elaborada trama donde los abruptos cambios de la historia no te permiten un respiro para que te pongas cómodo. El humor (muy) negro que se maneja, te deja dudando si debes reír o sentirte completamente asqueado; sin embargo este contraste agrega cierto encanto a la experiencia de ver el filme; además, los geniales (y grotescos) efectos visuales de la transformación física del protagonista: Wallace Bryton (Justin Long) solo hacen las cosas más escalofriantes.

Splinter (2009)

El debut de Toby Wilkins como director, trae esta película independiente que es una efectiva muestra del cine de “monstruos” un sub-género donde cada vez menos creadores se atreven a producir. Splinter podría también considerarse una película de zombies, pues es una infección que se esparce en las personas; sin embargo, esta criatura solo reanima parcialmente a los seres que infecta para llegar a otros seres vivos y no necesita humanos ni cuerpos completos para continuar creciendo. A pesar de contar con poco presupuesto, Wilkins utilizó muy bien sus recursos priorizando en los efectos especiales, pues la mayoría fueron hechos con utilería real y no por medio de computadoras. Los protagonistas, una feliz pareja (Paulo Costanzo y Jill Wagner) son obligados a agruparse con un convicto que ha escapado (Shea Whigham) y su novia drogadicta (Rachel Kerbs) en una tienda de conveniencia para tratar de sobrevivir  a una criatura que lanza espinas infecciosas.

High Tension (2003)

El gran manejo de la sangre y la violencia gráfica del director francés, Alexandre Aja, convierte a este en un gran filme gore. La historia se centra en una muy intensa atmósfera del juego del gato y el ratón, con pocos sustos que te harán saltar de tu asiento, pero mucha tensión y escenas llenas de brutalidad visualmente aterradoras, por lo que este filme no es para todos, incluso si son fans del terror. La película sigue a dos amigas, Marie (Cécile De France) y Alex (Maïwenn) que van de visita a la pintoresca casa de los padres de Alex, donde se vuelven potenciales víctimas de un psicópata sádico (Philippe Nahon) que llega a su puerta durante la noche. Marie entonces debe sobrepasar su miedo para convertirse en una formidable enemiga del asesino.

Hasta el Viento Tiene Miedo (1968)

Este filme es obra de “el duque del terror mexicano”, Carlos Enrique Taboada, que inició con esta película su tetralogía de terror. Taboada se enfocó en tramas sencillas pero asociadas a leyendas muy arraigadas en la cultura popular mexicana para infundir miedo en la audiencia; además la impresionante narración de la historia no se basaba en efectos especiales sino en un ambiente de terror psicológico con escenas que aunque no son explícitas, fueron genialmente logradas gracias al recurso de una profunda oscuridad que suma a la constante incertidumbre y tensión del espectador y de sus propias actrices, pues Taboada logró infundir miedo en su reparto durante la filmación, moviendo sus cosas de lugar así como haciendo que el piano tocara solo, lo que se tradujo en una psicosis colectiva dentro de la producción. La historia sigue la vida de un exclusivo internado femenil donde un grupo de amigas son obligadas a quedarse en el internado durante las vacaciones como castigo, es entonces cuando Claudia (Alicia Bonet) comienza a ser atormentada por un fantasma en sus sueños. A pesar del peligro, la implacable directora mantiene a las alumnas encerradas, lo que provoca una tragedia.

Shutter (2004)

Asia es una gran exportadora de contenido de terror y en este caso, la película tailandesa Shutter es nuestra recomendación de cine asiático de horror. Los directores: Banjong Pisanthanakun y Parkpoom Wongpoom, utilizaron el fenómeno de la “fotografía espiritual” como base de su trama, que se desarrolla entre culpa, engaños y venganza. Aunque generalmente en las cintas de terror existen momentos cómicos o lindos como alivio momentáneo, en Shutter ese no es el caso, la seriedad con la que se cuenta la historia destruye la posibilidad de que la historia se tornara cómica o tonta. La trama cuenta cómo después de pasar tiempo con sus amigos, Tun (Ananda Everingham), un jóven fotógrafo de Bangkok y su novia Jane (Natthaweeranuch Thongmee) atropellan a una misteriosa mujer en el camino, Tun convence a Jane de continuar sin detenerse ni prestarle ayuda a la mujer, lo que provoca que comiencen a tener visiones de ella. La mujer resulta ser la ex novia de Tun, que ha vuelto para buscar venganza sobre él y sus amigos.

The Babadook (2014)

Este filme de terror psicológico con elementos supernaturales que trata temas muy reales como el luto, el bienestar y los problemas que conlleva ser una madre soltera. Amelia (Essie Davis) es una viuda atormentada por la violenta muerte de su esposo Oskar (Benjamin Winspear) en un accidente automovilístico cuando la llevaba al hospital para dar a luz a su hijo Samuel (Noah Wiseman). 7 años después, Amelia aún no supera la muerte de Oskar y su comportamiento se ha vuelto  errático, es entonces cuando el libro “Mister Babadook” aparece en su casa para comenzar una serie de terroríficos eventos que amenazan la vida de ella y su hijo. Los personajes y actuaciones de los protagonistas son de las más poderosas que se han visto en un filme de terror en los últimos tiempos, la relación entre Amelia y su hijo se vuelve también parte importante de la atmósfera de incomodidad y tensión que rodea la trama.