Antes de comenzar necesito que te ‘empolves’ de la gran cantidad de tierra que se sacudió hace poco. El pasado domingo 2 de septiembre, el presidente del COI (Comité Olímpico Internacional) rechazó a los eSports en los juegos olímpicos debido a la brutalidad o violencia que pueden llegar a incluir. Fundamentó el rechazo a la solicitud en los valores que este glorioso y gigantesco evento fue formado hace miles de años.

En palabras del presidente:

Por supuesto que cada deporte de combate tiene sus orígenes en la lucha real entre personas. Pero el deporte es la expresión civilizada de eso. Si hay juegos electrónicos de matar a otros, eso no puede alinearse con los valores olímpicos’.

El punto es: ¿sabemos cuáles son esos valores?, ¿por qué los eSports van en contra del deporte olímpico?, ¿qué necesitamos hacer para lograr la inclusión?, ¿lo necesitamos en verdad?, ¿nos afecta en algo no ser parte de ello?

Vamos al inicio: en el año 776 a.C. en Olimpia, Grecia, se realizaron los primeros juegos olímpicos en el que el premio era una corona de Olivos. Con el paso de los años, debido a emperadores, prohibiciones y cambios en el sistema, las olimpiadas desarrollaron una estructura más formal en el año 1894 por el barón Pierre de Coubertin, en la Universidad de la Sorbona, en París. Se universalizó el deporte con el lema: “citius, altius, fortius”, que significa “más rápido, más alto, más fuerte”. El 24 de junio del mismo año se crea el Comité Olímpico Internacional (COI) con la integración de quince países. En la primera edición participaron solamente catorce países y 241 deportistas solamente hombres, desarrollándose en 43 pruebas de 10 disciplinas. Todo se cimentó en la excelencia, la amistad y el respeto.

Estos últimos tres valores fueron la justificación para dejar a un lado los eSports de las olimpiadas, pero, ¿por qué? Entendemos que algunos videojuegos puedan demostrar lo contrario a estos, sin embargo es algo irreal. Sí, en Halo, CoD y CS:GO todo se basa en matar a tu enemigo para ganar, pero se hace de la misma manera que las olimpiadas: de manera sana deportiva y competitiva.

Ahora, puede que al COI le cueste entenderlo, pero eventualmente las cosas cambian, evolucionan y avanzan. Y nos podemos dar cuenta tan sólo viendo las competiciones actuales.

Los deportes olímpicos originales eran atletismo, ciclismo, esgrima, gimnasia, halterofilia, lucha, natación, tenis y tiro. Hoy en día hay 44 disciplinas, más las de demostración (que se llevan a cabo pero no cuentan), en las cuales se incluyen deportes que hace tiempo ni siquiera se consideraban como una actividad deportiva. Exactamente igual que los eSports hace unos años.

No hay una fecha exacta, pero se afirma que los eSports han existido desde 1972, no de manera oficial, cuando decenas de estudiantes reunieron en el campus de la Universidad de Stanford para participar en un torneo de Spacewar.

¿Qué tan diferente es eso de ahora?

Por ejemplo: nos juntamos 100 jugadores de LoL; escogemos un modo de juego, compañeros de equipo, una composición de campeones, un lugar para el evento, el equipo gaming, el equipo de staff, patrocinadores, premios y ¡PUM!, tenemos nuestro propio torneo.

De manera personal yo creía que los eSports no debían estar en las olimpiadas porque no eran “lo mismo”, porque son una actividad completamente diferente. Platicando con un amigo, me preguntó: ¿por qué no es lo mismo?, ¿acaso no practicas y te preparas igual que un atleta?, ¿no practicas tus estrategias y tu técnica como lo haría un jugador de fútbol?, ¿no implica un esfuerzo físico? Y sí, es cierto. Recordé cómo en cientos de juegos a los que he jugado he perdido por no tener la puntería o velocidad de reacción necesaria.

Después de hacerme entrar en razón, me mostró este video:

Mostrándome algo que no viví en carne propia, pero me sentí completamente identificado. La canción usa un término abreviado APM que se refiere a ‘Action Per Minute’ , a la cantidad de acciones (comandos el teclado) que puede llevar un jugador en un minuto. Es decir, todo es más complicado de lo que pensamos. Implica conocer el juego por completo, los puntos de aparición, la cantidad de daño que hace uno u otro objeto, la forma más rápida de subir de nivel, saber de memoria el mapa, o las probabilidades de que el mapa sea de una u otra forma, entre muchísimas otras cosas.

Con esto, podemos ser consciente de que un eSport sí exige tanto como lo exige cualquier otro deporte, aunque no sea de la misma forma.

Entonces, concluyendo: , la mayoría de los juegos que participan en los eSports sí van en contra de los valores en los cuales se fundaron los cimientos de los juegos olímpicos debido a que la mayoría incluyen un cierto grado de violencia ficticia. Puede llegar a ser contraproducente promover ciertos valores y demostrar algo contrario a la hora de realizar el evento.

No olvidemos tampoco que muchos jugadores profesionales reciben apoyo por medio de patrocinios, siendo así la manera en que sustentan su estilo de vida; de este modo tengamos en cuenta que el Comité Olímpico no permite que los jugadores profesionales o que cuenten con patrocinio/equipo oficial sean parte de los juegos ¿Recuerdan esto? Por eso muchos jugadores profesionales de varios deportes no pueden competir en las olimpiadas.

En lo personal, no creo que necesitemos una inclusión de este tipo. Ya tenemos suficiente exposición, incluso en convenciones como la E3, la Gamescom, Tokyo Game Show, Blizzcon y mucho más, sobre todo eventos especializados como Ligas de LOL, Overwatch, Capcom Pro Tour, EVO, CEO, DOTA2, etc.; torneos de cientos de juegos que por separado pueden no llegar a la talla de las olimpiadas, pero que con una buena organización y patrocinadores fácilmente pueden alcanzar el mismo nivel. Debemos crear nuestro propio camino y establecer lo que será el futuro de los eSports como algo más que un simple evento de videojuegos, sino como el deporte electrónico del nuevo milenio.

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